PAN
2 de diciembre 19.00 h Teatro Valey, Castrillón
Gastamos mucho tiempo en educar a nuestros hijos tal como nos han educado a nosotros. Estamos
tan ocupados con esta tarea, que olvidamos que lo que les importa en realidad es jugar con
nosotros.
Padres e hijos… Un tema sin fin. Este espectáculo con mucha ternura y sentido del humor conecta
con aquel rincón de nuestro corazón, donde se guardan los recuerdos más íntimos que compartimos
con nuestros padres.
El juego no es una pérdida de tiempo, es la única manera de estar cerca de nuestros hijos.
Equipo creativo:
Olga Zeceva idea original, dramaturgia, escenografía
Dirección Aleksandar Curcic
Alberto Ortiz diseño de iluminación
El protagonista de esta obra es un personaje muy común. Su vida no es algo especial, pero está bien
ordenada. Cada cosa tiene su momento, y cada momento está en “la hora de…”. En esta vida, tan
bien ordenada, aparece una criatura muy diminuta, como de otro mundo, y da la vuelta a todo. Y
entonces el orden cambia, su vida cambia, todo cambia. Y es muy molesto, porque este pequeño
hombrecito lo quiere todo – su cama, su comida, su tiempo.
Cuando son pequeños, no tenemos tiempo para jugar con ellos. Y cuando nos hacemos mayores y
tenemos todo el tiempo del mundo, son ellos los que ya no tienen tiempo para nosotros. Han
crecido, se han convertido en adultos, para los que el tiempo de jugar es una pérdida de tiempo,
igual que lo fue para nosotros.